amanecí viento gris..
corriéndome en raudales colas
el oleaje de tu olvido..
puede que mi otoño se dé en este devenir..
mirando la luz que se enmudece..
con este dolor de hojas
que se arrastran en mis ojos..
soy como camino abandonado..
nada pasa por aquí..
solo este viento helado..
esta soledad que amaga mi destino;
desnuda de ti..
no atino a comprenderme,
qué dolor de desamor
qué pozo más profundo me he cavado,
ya no sé que más llorar
si tu abandono
o lo ruin que descaraste tu cariño..
hoy soy...
... lluvia helada..
lloro al tocar las palabras de la ausencia
me vuelvo mar que embravecido
azota las costas de tu cuerpo...
solo son recuerdos tristes...
no pudiste navegar en mi..
no aprendiste marinero,
me tejiste una barca de mentiras..
y después.....
¡qué dolor de no poder creer!
¡qué dolor!... ¡nada fue cierto!...
las mentiras han sido tu clavo..
yo fui tu herramienta
hiciste para mi un puente falso
Estamos en la orilla
tú, sonriente,
como siempre en la broma de tu vida
yo no sé si esté dolida...
más dolor no se puede dar en esta vida...
amanecí viento gris..
en mi rostro negros nubarrones,,
soy otoño de un amarillo seco
mi luz se ha hecho fria..
ya no soy ningún fogón..
nadie en mi calentara sus manos..
estoy en esta orilla..esperando
¡ven sol !
¡dame un rayo que merme este desencanto!
entibia mi alma que muere helada
¡sin abrigo..!
¡sin esperanza..!
¡¿dónde vas destino?!
¡llevame contigo!
tén compasión de esta alma
que perdida vaga solitaria...
devuélveme a mi cuerpo..
no quiero ser este fantasma
un vaho pegado en la ventana...
qué dolor de desamor me tiene agonizante..
muero en esta desilusión
de saberte un farsante.
rocio avitia
chihuahua, chihuahua, méxico
